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  • Panorama Lechero de septiembre de 2018: CAPROLECOBA 20/9/2018


    CONDICIONES AGROCLIMATICAS

    Septiembre transcurre con condiciones climáticas normales, en nuestra Cuenca Oeste y la provincia de Bs As. Con suelos bien cargados de reservas en el perfil, y alguna variación en la necesidad de moderadas recargas de humedad en superficie. Hasta mediados de Octubre, los centros de investigación y monitoreo del clima, nos dicen que podrán mantenerse las alternancias de masas de aire frío y cálidas, de origen subtropical. Con bajo riesgo de heladas tardías en este año. El régimen de lluvias es probable que siga normal, y en la primavera se ubique cerca de los 250-300 milímetros que requieren los cultivos. Es decir, que se confirmaría una campaña con clima normal o favorable, a diferencia del año previo, en la que, como se ha venido anticipando, pasaríamos de condiciones de neutralidad a condiciones de “Niño débil” (fenómeno ENSO).

    PRODUCCIÓN Y PERSPECTIVAS

    La producción nacional de leche alcanzó los 948 millones de litros en Agosto (+4,1% que en 2017) y entre Enero y Agosto marcó +6,4% interanual. (Datos OCLA en base a DNL-MINAGRO). Pero los recibos de fábrica en el Oeste de Bs As siguen en niveles similares a los del año previo. En los tambos, la humedad del suelo alcanzó para sostener buena producción de pasto, el consumo de reservas se aceleró, hubo que “racionalizar” en extremo el uso de concentrados, y la agobiante situación financiera, mandó prematuramente al gancho a muchas lecheras, para poder pagar las deudas y bancar las inversiones hacia el 2019.

    EL ESCENARIO COMERCIAL

    Agosto: “Remando” las subas con esfuerzo. En Agosto hubo una nueva suba de precios en la Cuenca Oeste, en el orden del 5,6% en $/litro, y cercana al 6,3% en $/Kgs. de SU. Como solemos comentar, esta diferencia se explica en que los incrementos se referencian todavía en “$/litro”, y hemos ingresado en el período en que los sólidos de la leche, de a poco, comienzan a bajar. En la comparación interanual (a moneda corriente) quedamos arriba 32% en “$/litro” y 31% en “$/Kg. de SU” sobre 2017. Y en dólares, los precios se ubicaron en torno a u$s 0,20/litro, y u$s 2,80/Kg. de SU.

    Septiembre: La “macro” nos corre el arco a menudo. Cada nuevo mes los productores negociamos mejoras de precio que necesitamos con urgencia, como más cortos plazos de pago. Conocemos los problemas de las industrias tanto como los nuestros, claro que así como venimos, hoy nos es imposible mantener los flujos operativos sin desacomodar más los flujos financieros. Cosa que no se puede eternizar (como lo está haciendo). Para colmo, la “macro” nos corre el arco a cada rato. En lo inmediato, pareciera que lo único que podemos esperar son buenas condiciones para el pasto en esta primavera, para poder bajar costos y atenuar pérdidas, aunque sea unos pocos meses. Y eso es muy bueno, pero no alcanza.

    ESCENARIO COMERCIAL Y MARCO INSTITUCIONAL

    Hacia un nuevo “mapa de actores” en el escenario comercial. Atravesamos una “crisis”, que además de ser una de las más severas y prolongadas que nos haya tocado enfrentar, presenta en su camino de salida una significativa reconfiguración del mapa de jugadores industriales. En la nueva situación, varias empresas importantes habrán cambiado de manos y de conducción, otras habrán terminado su ciclo, y otras entrarán a la cancha. Próximos ya a terminar el proceso de desestructuración de SanCor, vemos cómo la tradicional cooperativa sólo se quedará con algunas plantas, mientras que el resto pasó o pasará a manos de otras industrias. Las nuevas dos “grandes empresas” de la lechería argentina son Saputo y Arcor-Mastellone. La primera con preeminencia en Santa Fé y Córdoba, y la segunda en Bs. As. (Aunque ambas operen en todo el territorio). Y la novedad más importante, será la aparición en el firmamento industrial de Adecoagro, que es la principal firma productora de leche del país. Con 300.000 litros propios (y un plan de duplicarlos en tres años), y el control de las plantas de Morteros y Chivilcoy, que en conjunto, le dan un potencial inicial de manejo de 2 millones de litros diarios.

    La institucionalidad de la Cadena Lechera plantea preguntas que esperan respuestas. Son muchos, grandes y vertiginosos los cambios que nuestro sector viene experimentando y proyecta hacia el futuro cercano. Lo aceptamos, pero es además importante comprender el sentido de esos cambios, y qué es lo que exigen de nosotros, como adaptación o corrección imprescindible en nuestro manejo empresario. ¿Nos hemos preguntado cómo puede ser que en un sector como el nuestro (en el que ninguno de sus actores principales tiene destino si no es articulado con el otro) no tengamos aún un espacio formal ni informal para el imprescindible diálogo y el trabajo conjunto de producción e industria? ¿Puede proyectarse nuestro esfuerzo productivo sin una adecuada comercialización? ¿Puede ordenarse la comercialización de la leche en una forma que no surja de la negociación y el consentimiento de las partes? ¿Puede concebirse la resolución de todo lo anterior sin una adecuada institucionalidad de la lechería, que nos dé el espacio en el que definamos el rumbo y las reglas de juego para nuestro desarrollo competitivo?

    extractado por OCLA del Boletín de Caprolecoba